El #TenerifeRealZaragoza, un duelo tan repetido como igualado

El CD Tenerife y el Real Zaragoza se miden este viernes (19:30 horas) por trigésimo segunda ocasión desde que abrieron su serie de duelos en competición oficiales. Aquella primera vez en la Copa del Generalísimo (28 de mayo de 1961) dio paso a una rivalidad –la octava más repetida entre los 220 equipos contra los que se midió el Tenerife desde 1922– que presenta un balance en Liga casi simétrico (nueve victorias, 11 empates y ocho derrotas), solo desequilibrado si se añaden los tres éxitos tinerfeñistas en la competición del KO.

Los #TenerifeRealZaragoza evocan numerosas conexiones entre la historia del representativo blanquiazul y del club blanquillo. Así la figura de Eleuterio Yeyo Santos –pichichi en el ascenso a Primera División de 1961 y luego componente de los cinco Magníficos, la delantera más legendaria que tuvo nunca del equipo maño– o una amarga eliminación –y la despedida de Alberto Molina como eterno futbolista del CD Tenerife– en los cuartos de final de la última Copa que se disputó con la denominación del Generalísimo (75-76). O el nuevo regreso a la Isla de Víctor Fernández (438 partidos como entrenador de su Real Zaragoza), una plaza en la que probó fortuna, sin suerte, en la temporada 97-98.

Balance como local

El resumen en cifras de los veintiocho #TenerifeRealZaragoza de Liga disputados hasta ahora –trece en Primera División y el resto en la Segunda– ofrece un balance casi igual de bueno para el representativo que para su rival de esta semana, al que se impuso solo una vez más que las derrotas que le infligió el Real Zaragoza. La simetría en este pasado común se termina de explicar con los once empates, el signo más repetido en los sesenta y dos años de relación.

Blanquiazules y blanquillos no se encontraron en el Heliodoro Rodríguez López hasta el fugaz estreno del CD Tenerife en la élite, cuando a seis jornadas del final de la Liga ya estaba condenado a un descenso seguro, como luego fue. Eso no impidió que el equipo que dirigía José Enrique Rabassa –tras el cese de Brocic y una interinidad de tres encuentros con Vicente Gimeno– se regalara una victoria brillante (4-2) frente a un Real Zaragoza que llegaba a la Isla como tercer clasificado y que acabaría el curso cuarto y clasificado para la Copa de Ferias (lo que hoy sería la UEFA Conference League).

Privado por el servicio militar del portero Cuco y dos de sus mejores artilleros (Santos y José Juan), el CD Tenerife tiró del inusual acierto del argentino Larraz –un triplete aquel día y su única contribución de éxito en los siete partidos de Liga que jugó– y de otro del grancanario Paquillo Vega. El doblete de Seminario completó el 4-2 final, un oasis en el doloroso primer paso por la máxima categoría.

Dos veces en la Copa

CD Tenerife y Real Zaragoza solo coincidieron dos veces, con suerte repartida, en cruces del Campeonato de España, curiosamente la competición en la que se vieron por primera vez en partidos oficiales. El primer emparejamiento data de la temporada 60-61, con el representativo engallado tras firmar el 30 de abril de 1961 su primer ascenso a la élite y deshacerse en la ronda de dieciseisavos (3-0 en casa y 1-0 en Altabix). Ya en octavos, perdió en La Romareda (1-0), ganó en la vuelta (1-0, José Juan) y repitió resultado (Paquillo, 3') en el choque desempate de dos días después. En su estreno en los cuartos de final del torneo, el Club Atlético de Madrid relegó a los blanquiazules.

Más amarga fue la resolución del siguiente emparejamiento, ahora por un puesto en las semifinales de la que fue última Copa del Generalísimo. De la mano de Felipe Mesones, el Tenerife 75-76 se había deshecho del Real Madrid CF en los octavos de final (2-0 en el Heliodoro y 1-0 en el Bernabéu) y con solo una jornada de Liga por disputarse –y la permanencia en Segunda más que asegurada– vio posible colocarse a un paso de la final.

Más aún tras la victoria (1-0) en la ida, gracias a un gol de Jorge Fernández en el minuto 17 que obligaba a los maños a marcar en una vuelta resuelta injustamente (2-0) con sendos tantos en cuatro minutos fatales (63 y 67) del todocampista paraguayo Nino Arrúa (77 goles en 164 partidos con el Zaragoza). Aquel amargo 9 de junio de 1976 supuso también la despedida de Alberto Molina como jugador del CD Tenerife, 413 partidos y trece años después de su debut.

Goleadores

Desde que Larraz se estrenara con un triplete en la primera visita liguera del Real Zaragoza en la temporada 61-62, solo Óscar Dertycia igualó ese registro, mientras que a dos goles llegaron Chano y Oliver Neuville. En orden cronológico, la serie la completan (además de uno en propia puerta del portero Cristian Álvarez) Paquillo Vega, Joaquín, Toño Hernández, Quique Estebaranz, Ezequiel Castillo, Pier, Felipe, Pizzi, Juanele, Makaay, Barata, Kiko Ratón, Nino, Juanlu Hens, Juanjo, Maxi Pérez, Germán Sánchez, Carlos Ruiz, Nano, Milla y Shashoua.

#TenerifeRealZaragoza #AmorEterno