'Centenario de una pasión': Cabrera (capítulo XLVIII)

El primer capítulo estuvo dedicado, ‘in memoriam’, a la figura de Paco López Gómez.En el segundo, el protagonista fue Pablo Llanos. Ya el tercero llevó la firma de Alberto Molina. El cuarto capítulo fue para Toño Hernández. En el quinto el protagonismo es para Juan Figueroa. En el sexto nos acercamos a José González Carrillo, presidente entre 1969 y 1972.

El séptimo estuvo dedicado a la figura del defensa César Gómez. En el octavo el protagonista fue Santiago ’Santi’ González. En el noveno capítulo el protagonista es José Antonio Barrios Olivero. En la décima entrega de ‘Centenario de una pasión’ el protagonista fue Cristo Marrero Henríquez  A continuación destacamos la figura de David Amaral Rodríguez. En la siguiente entrega el protagonismo fue para Enrique Juan Medina Rodriguez. En el siguiente capítulo acercamos a Carlos A. Schwartz . Luego el  protagonista fue Sergio Aragoneses Almeida.

En la decimoquinta destacamos a Felipe Miñambres Fernández. El decimosexto capitulo es para Gonzalo López Segovia, ‘Chalo’. El decimoséptimo episodio es para Ricardo León Brito. En la siguiente entrega el protagonista fue Manolo López Santana. El decimonoveno fue para José Luis Martí Soler. En la siguiente entrega el protagonista es Julio Durán. El vigésimo primer capítulo fue para José Manuel Pitti. En el penúltimo destacamos al internacional absoluto con España, Pier Luigi Cherubino.

En el vigésimo tercer capítulo el protagonista es Antonio Mata (Olivenza, Badajoz, 1968). Un tanto del central extremeño forma parte de los mejores momentos de la historia blanquiazul. Se lo marcó al Brondby –en marzo de 1997 en el Parken de Copenhague– y le dio al CD Tenerife la clasificación para las semifinales de la Copa de la UEFA.

El vigésimo cuarto capítulo fue para Marc Bertrán (Puebla de Segur, Lérida, 1982),  uno de los artífices del último ascenso del CD Tenerife a Primera División. Y en el vigésimo quinto video el protagonismo es para Agustín Lasaosa (Huesca, 1958) fue el mayor ídolo blanquiazul a principios de los años ochenta y uno de los artífices del ascenso a Segunda División, logrado en el curso 82-83, tras un lustro interminable alejado del fútbol profesional.  Delantero rápido y con gol, vivía de la velocidad, las paredes y los desmarques, alejándose del estereotipo del ariete clásico de choque, pundonor y cabezazo.

El vigésimo sexto capítulo es para Quique Estebaranz. Extremo con desborde y gol, Quique Estebaranz (Madrid, 1965) fue una pieza vital en la consolidación del CD Tenerife en Primera División y participó en los dos triunfos ligueros ante el Real Madrid, que cambiaron la historia del fútbol español. Autor de 35 tantos en los 159 partidos oficiales que disputó en sus cuatro temporadas (1989-1993) en la Isla.

El vigésimo séptimo capítulo es para Álvaro Cervera, que lideró el último ascenso del CD Tenerife al fútbol profesional en la campaña 2012/ 2013. Antes dotó al grupo de un estilo propio y promocionó a media docena de jugadores de la tierra, que le darían un excelente rendimiento deportivo y económico a la entidad. Es el segundo entrenador que más partidos ha dirigido al conjunto blanquiazul en su historia (110).

El vigésimo octavo capítulo fue para Jesús Vázquez (Santa Olalla del Cala, Huelva, 18/1/1980), centrocampista de gran despliegue físico y notable calidad técnica, fue el faro blanquiazul a principios de este siglo, cuando el CD Tenerife sobrevivió en Segunda División entre cambios en la presidencia y graves problemas económicos. Procedente del Extremadura, fue el último fichaje de Javier Pérez.

En el siguiente el protagonista fue Juan Carlos González, ‘Xuancar’. Su inconfundible voz está ligada a los mejores momentos de la centenaria historia del CD Tenerife, equipo al que sigue desde niño, como aficionado y como periodista desde hace más de cuarenta años. Hijo de Vicente González, ‘Vigoal’, se adentró en el mundo de la información, pasando a máquina las crónicas de su padre para empezar a colaborar en el curso 75-76 en medios como la ‘Hoja del Lunes’, ‘La Tarde’ o Radio Club Tenerife.

El trigésimo capítulo es para Pello Aguirreoa (Ondarroa, Vizcaya, 1954). No se pudo consolidar en San Mamés, pero sí triunfó plenamente en el Club Deportivo Tenerife. Guardameta más sobrio que espectacular, muy poco dado a los errores, en los años ochenta fue un referente blanquiazul durante media docena de temporadas, en las que disputó 220 partidos oficiales y firmó dos ascensos a Segunda División, sellados, respectivamente, ante Compostela y San Sebastián, en ambos casos, en un Heliodoro repleto.

En el trigésimo primero acercamos la figura de Antonio Pinilla Miranda (Badalona, Barcelona, 1972) uno de los héroes silenciosos del mejor CD Tenerife de la historia. En siete temporadas en la Isla disputó 218 partidos oficiales como blanquiazul y marcó 35 goles, pero nunca reclamó la atención mediática. Deslumbró en su debut con cuatro goles en el Trofeo Joan Gamper, fue el autor, frente al Auxerre, del primer gol marcado por el equipo blanquiazul en la Copa de la UEFA y ofreció su mejor rendimiento en la era Heynckes, siendo vital tanto en la segunda clasificación europea del conjunto insular, como en las eliminatorias ante Feyenoord o Brondby.

En el siguiente el protagonismo fue para Senén Cortegoso (Pontevedra, 1953), fisioterapeuta de la selección español y oro olímpico en Barcelona 92, fue la figura mediática del servicio médico del CD Tenerife en la gloriosa década de los noventa, con estrellas por todo el campo y en el banquillo. Fichado por Javier Pérez en el verano de 1991 para recuperar a Paqui, vino a la Isla por unos meses y se quedó ocho temporadas, convirtiéndose en una de las referencias del vestuario por su carisma y profesionalidad. Por sus manos pasaron también muchos jugadores ajenos a la disci

El siguiente capítulo de la serie fue para Suso Santana (Santa Cruz de Tenerife, 1985) es el futbolista tinerfeño que más partidos ha disputado con la camiseta del Club Deportivo Tenerife. Formado en la cantera blanquiazul, recorrió el Archipiélago como cedido antes y después de debutar con el primer equipo. Consolidado como profesional en Escocia, allí ganó una Copa con el Hearts y regresó a la Isla en su mejor momento, con el reto de devolver al club de su Isla al fútbol profesional.

Luego presentamos a José Ramón Lamelo (Monforte de Lemos, Lugo, 1942 que en una temporada entró en la historia blanquiazul al liderar el único éxito del representativo insular ante la UD Las Palmas en una eliminatoria de la Copa del Rey. Recaló en la Isla en el verano de 1980, para dirigir a un equipo que estaba en Segunda División B y que tenía a 22 tinerfeños en la plantilla.

El trigésimo quinto capítulo el protagonismo es para José Juan Gutiérrez (Santa Cruz de Tenerife, 1941) con 74 goles ocupa el sexto lugar en el escalafón de máximos realizadores históricos del Club Deportivo Tenerife, pese a que entre sus dos etapas como blanquiazul estuvo un lustro en la mejor Unión Deportiva las Palmas de todos los tiempos. Leyenda viva del fútbol canario, se formó en el recordado Real Unión, que a finales de los años cincuenta dominaba las competiciones regionales antes de ser uno de los protagonistas del primer ascenso del Club Deportivo Tenerife a la élite del fútbol nacional.

En el trigésimo sexto acercamos la figura de Juan Carlos Castañeda que cumple su trigésimo novena temporada como narrador de los partidos del CD Tenerife y con más de mil encuentros transmitidos in situ es el periodista que más encuentyros ha relatado del equipo blanquiazul en su centenaria historia. Nacido en Puerto de la Cruz, estudió Derecho, pero quedó atrapado por el periodismo y, aunque ha hecho televisión con mucho éxito y ha trabajado en periódicos como El Día o La Gaceta de Canarias, su imagen y su voz están asociadas a la radio y al deporte.

Durante cuatro décadas de trayectoria profesional ha trabajado para Antena 3 Radio, la Cadena COPE, Radio MyD y Radio El Día antes de recalar en Radio Club Tenerife (Cadena Ser).

El trigésimo séptimo es para Jorge Fernández. Centrocampista de infinito talento y buena relación con el gol, Jorge Fernández (Santa Cruz de Tenerife, 1951) fue vital en el regreso del CD Tenerife al fútbol profesional y un referente blanquiazul en los años 70, pese a su complicada relación con el Heliodoro.Disputó 221 partidos y marcó 33 goles, algunos de ellos vitales, rozando en varias ocasiones el ascenso a la Primera División.

A continuación fue el actual socio número 1. Roberto Martín Abreu (Madrid, 1942). Afiliado a la entidad blanquiazul desde el 4 de agosto de 1952, suma 70 años de ininterrumpida fidelidad a un equipo al que sigue junto a toda su familia desde Tribuna baja. Nacido fuera de Canarias, por el destino profesional de su padre, a los pocos meses se trasladó a la Isla y, desde muy pequeño, al vivir junto a la sede social de la entidad, participó de la vida de un club que entonces jugaba en el ámbito regional y sobre un campo de tierra.

En el el trigésimo noveno capítulo acercamos la figura de Aguinaldo Gallón, ‘Guina’ (Ribeirao Preto, Brasil, 1958)  al que le bastaron tres temporadas en la Isla para convertirse en una leyenda blanquiazul. Dueño de un asombroso golpeo de balón, fabricó una conexión inmortal con Rommel Fernández y fue vital en el ascenso que cambió la historia del CD Tenerife.

Centrocampista con talento y gol, el jugador brasileño, máximo goleador del Mundial Juvenil de 1977, también demostró carácter en todas sus apariciones y no se arrugó cuando fue preciso ir a la guerra, como en la histórica noche del Villamarín, en la que el grupo que dirigía Benito Joanet alcanzó el paraíso.

Y el cuadragésimo capítulo fue para Jorge Valdano (Las Parejas, Argentina, 1955) es posiblemente uno de los técnicos con más trascendente en la historia del CD Tenerife. En abril de 1992, Se hizo cargo de un equipo que ya estaba en Primera División, pero luchaba por su supervivencia en la élite y dejó una entidad con fama planetaria y protagonista del fútbol español.

Ocho partidos mágicos para lograr una permanencia en la que pocos creían, una participación europea (93-94) repleta de noches épicas, una inédita presencia en las semifinales de la Copa del Rey y dos inolvidables cierres de curso con el Heliodoro convertido en ‘juez de la Liga’, hicieron de aquel conjunto –el Tenerife de Valdano– una referencia nacional.

El siguiente protagonista fue Mauro Pérez. Una jugada genial, un penalti inventado junto a la grada de Herradura, dio a Mauro Pérez (San Cristóbal de La Laguna, 1946) un hueco eterno en el anecdotario blanquiazul. Eso sí, su pillería no debe dejar en segundo plano una trayectoria notable, saldada con un ascenso vital a Segunda División.

En la pasada el turno fue para un portero blanquiazul. Aficionado desde niño al CD Tenerife, Dani Hernández (Caracas, Venezuela, 1985) brilló en las categorías inferiores de su equipo y el destino le permitió, ya con 29 años, regresar a casa para sumar ocho temporadas como blanquiazul y rozar en dos ocasiones el ascenso a Primera División.

Titular indiscutible para casi todos los entrenadores, sumó 216 partidos como blanquiazul, en los que recibió 224 goles, despidiéndose entre lágrimas del equipo de su alma el pasado verano para alargar su carrera deportiva en el Fuenlabrada.

La época más gloriosa del CD Tenerife está ligada a la inconfundible voz de Mayte Castro (Santa Cruz de Tenerife, 1968), que durante más de dos décadas residió en el Heliodoro Rodríguez López y abrió el camino a las mujeres en el ámbito de la información blanquiazul.

Aficionada al fútbol desde niña, ya iba al estadio capitalino de la mano de su familia, antes de hacerlo acompañada del micrófono de Radio Club Tenerife, formando parte durante años del hábitat que se resguardaba bajo la grada de Tribuna, hasta que los nuevos tiempos acabaron con los inalámbricos en los campos de fútbol.

El capítulo 44 es para el presidente que más tiempo ha permanecido en el cargo en la centenaria historia blanquiazul. Empresario de origen palmero, ligado, entre otros ámbitos, al mundode la construcción y de los servicios, Miguel Concepción Cáceres (Los Llanos de Aridane, 1953). En febrero de 2006, ya era el máximo accionista del Tenerife cuando aceptó, por responsabilidad la presidencia de una entidad con una deuda de casi 60 millones de euros amenazada por la desaparición y que había perdido arraigo social y apoyo popular.

En diciembre de 2022, inaugurada las nuevas dependencias de la Ciudad Deportiva y celebrado el Centenario, dejó una institución asentada en el fútbol profesional y capacitada para ascender y sobrevivir en Primera División, con una deuda de poco más de diez millones de euros calificada por los expertos como asumible y con unos 12.000 abonados, y que en el plano deportivo, cuando rozó la gloria hace unos meses, llenó de orgullo a una isla que durante varias semanas se tiñó de blanco y azul.

El 45, es para Francis Rodríguez. Niño prodigio en el Unión Tejina y campeón de todo con el equipo juvenil del Real Madrid, Francisco Javier Rodríguez Hernández, Francis fue vital en la consolidación del CD Tenerife en la élite, hasta que una lesión precipitó primero su adiós a la Isla y, luego, su retirada del fútbol.

Tras el ascenso blanquiazul a Primera División regresó a la Isla, vivió la agónica promoción de permanencia ante el Deportivo y fue titular con todos los entrenadores hasta que las lesiones le invitaron a emigrar al Marbella en el que apenas pudo jugar, retirándose con 32 años. 

El capitulo 46 estuvo dedicado a la figura de Sebastián Cruzado, Chano (Huelva, 1965) fue el dueño de la banda derecha del mejor Tenerife de la historia y tiene el honor de haber sido el único jugador blanquiazul en participar en todos los encuentros disputados por el equipo insular en la Copa de la UEFA. 

Interior con mucho recorrido y notable regate, pese a su aparente lentitud, tenía un exquisito golpeo de balón y fue titular con todos los entrenadores que tuvo en la Isla y pese a estar un año parado por culpa de una lesión, en sus ocho temporadas con el CD Tenerife sumó 293 partidos oficiales, marcó 36 goles y pudo debutar con la selección absoluta en una cita marcada por el fallecimiento de su padre pocas horas antes del choque.

La pasada semana en el capítulo 47 el protagonista es Eduardo Ramos (La Laguna, 1966). Marcó uno de los goles más importante del CD Tenerife en sus 100 años de historia. Su tanto en Riazor, en junio de 1990, le permitió al equipo blanquiazul continuar en Primera División antes de firmar una década prodigiosa en la élite del fútbol español. Más allá de su cabezazo salvador ante el Deportivo, el jugador lagunero tuvo una sólida carrera profesional adornada con más de 50 partidos al máximo nivel con el representativo insular.

En el 48 el protagonista es José de la Rosa Cabrera (Santa Cruz de Tenerife, 1946) fue un referente blanquiazul a principios de los años setenta. Máximo goleador histórico del CD Tenerife en Tercera División, lideró el ascenso en 1971 del grupo de jóvenes canteranos que devolvió al equipo blanquiazul a la categoría de plata.

Natural de San Andrés y conocido como Vivillo en el terreno deportivo, fue en sus inicios un interior zurdo con llegada que, con el tiempo, se transformaría en mediocentro defensivo para totalizar 184 partidos oficiales y 34 goles en sus seis cursos en el representativo insular, al que dejó consolidado en el fútbol profesional.

Muy ordenado tácticamente y más efectivo que espectacular, fue criticado con dureza por un sector del Heliodoro y emigró a la Península, jugando un curso a muy buen nivel en el Nàstic de Tarragona. Sin embargo, regresó a la Isla con apenas 28 años para brillar durante un lustro en el ámbito regional. Sin vocación de entrenador, sigue ligado al fútbol como espectador televisivo.

#HistoriaCDT #UnSentimientoQueNosUne